II Dmanisi

"Situado a 85 km al suroeste de la capital de Georgia, Tbilisi,
y enterrado bajo las ruinas de la ciudad medieval,
se encuentra uno de los yacimientos más emblemáticos
para el esclarecimiento de uno de los episodios
más candentes de nuestra historia: cuándo salimos de África y por qué.
Situado sobre una columna basáltica
los depósitos se han datado en 1’8 millones de años.
Aunque se desconoce por el momento la extensión total del sitio,
se han excavado 150 m2.
El registro arqueológico pleistoceno de Dmanisi tiene un espesor de 4 m.

Se han reconocido tres niveles estratigráficos
que de inferior y más antiguo a superior y más moderno son:
*Sedimento formado por cenizas volcánicas, sedimentos coluviales y fluviolacustres,

en el que se han recuperado restos de grandes mamíferos,

industria lítica y restos humanos (Homo georgicus).
*Costra carbonatada con restos de fauna e industria lítica.
*Estrato formado por arena volcánica y cantos retrabajados de origen coluvial

en el que se han encontrado fauna e industria lítica.

Este es el nivel más rico a nivel arqueológico.

En el año 2000 se identifica a partir de una mandíbula casi completa
una nueva especie bautizada como Homo georgicus,
y se dan a conocer los dos primeros cráneos de esta nueva especie,
recuperados en este yacimiento y que demuestran que la salida de África
se produjo hace casi 2 millones de años, un millón más de lo que se pensaba.
Un tercer cráneo, presentado en el 2001,
se encuentra en perfecto estado de conservación
y corresponde a un individuo de pequeño cerebro (600 cm3)
lo que cuestiona la idea, imperante hasta la fecha,
de que el aumento del cerebro fuera la causa de la migración.

Los habitantes de Dmanisi vivieron bajo un clima árido con paisajes abiertos,
se instalan próximos a un lago o charca y fabrican herramientas
con tecnología olduvaiense con materia prima
que recogen de los ríos próximos al yacimiento.
Los animales que se han encontrado son autóctonos
como tigres dientes de sable, rinocerontes, elefantes, caballos, ciervos y lobos,
y de origen africano como la jirafa de cuello corto o la avestruz.
Estos dos últimos sugieren que los homínidos se desplazan hacia el norte
siguiendo las migraciones de animales africanos.

Durante la campaña de excavación de este año se han recuperado más restos humanos
como un metatarso, una clavícula, una escápula y un fémur
que hay que sumar a los cráneos y mandíbulas de años anteriores.
Gracias al acuerdo de cooperación cultural y educativa
entre España y Georgia iniciado en el 2003,
este verano varios arqueólogos y paleontólogos
del Equipo Investigador de Atapuerca han participado en la campaña de excavación".


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